Cómo aumentar los beneficios de tu restaurante sin subir los precios

¿Quieres aumentar los beneficios de tu restaurante sin subir los precios? Empieza por revisar tu menú actual.

Cada carta oculta un gran potencial de rentabilidad. A menudo, no se trata de crear nuevos platos o usar ingredientes exóticos, sino de tomar mejores decisiones sobre lo que ya ofreces.

Cada plato que sirves puede clasificarse en una de cuatro categorías, y cada una te indica exactamente qué hacer para mejorar la rentabilidad de tu menú.

Los buenos restaurantes analizan su menú con este sistema.

Los malos confían en la suerte y en la intuición.

Las 4 categorías de platos y qué hacer con cada una

1. Estrellas

Alta rentabilidad y alta popularidad.

Son tus héroes: los platos que tus clientes adoran y que te generan beneficios.

Promuévelos de forma visible en el menú y en tus canales de comunicación.

Prueba pequeños aumentos de precio si es posible.

Mantén siempre la calidad y nunca comprometas la experiencia.

Las Estrellas definen la reputación de tu restaurante. Merecen atención, visibilidad y consistencia. Una Estrella bien gestionada puede convertirse en el pilar silencioso del éxito de tu negocio.

2. Caballos de batalla

Alta popularidad pero baja rentabilidad.

Se venden bien, pero los márgenes son débiles. A los clientes les encantan, pero a tu contable no tanto.

Busca maneras de reducir costes, por ejemplo, en ingredientes o en el proceso de preparación.

Prueba pequeños aumentos de precio sin asustar a los clientes.

Mantenlos en la carta, pero haz que trabajen más por tu beneficio.

A veces, un pequeño ajuste en la porción, un cambio de guarnición o una compra más eficiente puede marcar la diferencia. El objetivo no es eliminar lo que funciona, sino evitar que limite tu rentabilidad.

3. Puzles

Alta rentabilidad pero baja popularidad.

Tienen buenos márgenes, pero no se venden lo suficiente.

Promuévelos más, tanto en el restaurante como en redes sociales.

Revisa su posición y nombre en el menú para que sean más fáciles de encontrar.

Forma a tu equipo para recomendarlos activamente a los clientes.

A menudo son platos excelentes con poca visibilidad. Tal vez el nombre no conecta o están escondidos en un rincón del menú. A veces, basta con una mejor historia o con la recomendación entusiasta de un camarero para convertir un Puzle en una Estrella.

4. Perros

Baja rentabilidad y baja popularidad.

Estos platos consumen recursos: tiempo, ingredientes y energía.

Elimínalos o adapta la receta.

Simplifica la porción o la preparación si decides mantenerlos.

Sustitúyelos por nuevas propuestas que encajen mejor con tus clientes.

A veces cuesta despedirse de ciertos platos, sobre todo si llevan años en la carta. Pero cada Perro ocupa un espacio que podría aprovecharse con algo más rentable. Un menú inteligente es claro, enfocado y eficiente.

Tu menú es una herramienta de negocio

Tu menú no es solo una lista de platos, es una herramienta estratégica.

Indica a tus clientes qué comer y determina cuánto dinero ganas.

El objetivo no es cocinar más, sino cocinar mejor.

Revisar tu menú regularmente con este sistema te permitirá tomar mejores decisiones, aumentar la rentabilidad y fortalecer la identidad de tu restaurante.

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